¿El Saludo al Sol o Surya Namaskar es
uno de los imprescindibles en las sesiones de yoga. Casi todos lo
conocen en su versión clásica, aunque puede que te lleves alguna
sorpresa de mano del Ashtanga Yoga. Aquí te explicamos en qué consiste y te dejamos 15 consejos prácticos para acercarte y disfrutar del Saludo al Sol.
¿Qué es el saludo al sol?
Es un vinyasa, una secuencia de posturas que se enlazan a
través de la respiración. Tradicionalmente se incluye al principio de la
práctica puesto que es perfecta para calentar el cuerpo, centrar la
mente, sincronizar movimiento y respiración y situarte de pleno en tu
práctica. El Saludo al Sol es la plataforma perfecta para profundizar en
posturas básicas y muy efectivas o para introducir nuevas variantes y
modalidades.
Dependiendo de la línea de yoga que practiques puedes encontrarte con modificaciones que transforman la base del Surya Namaskar Clásico y lo hagan más potente (Surya Namaskar A o B del Ashtanga Yoga de Sri Pattabhi Jois)
¿Qué beneficios te aporta el Saludo al Sol?
La práctica continuada del Surya Namaskar es fuente de salud
y vitalidad. Se recomienda practicar por la mañana por los beneficios
inherentes a desentumecer el cuerpo tras horas de sueño e inmovilidad,
pero puedes adaptarlo a cualquier hora del día.
Al principio puede resultar agotador pero puedes comprobar que, a medida
que practicas, el Saludo al Sol se vuelve fluido, ligero, generoso y
balsámico.
Entre otras cosas, el momento de la práctica es tuyo, y ahí ya tienes el mayor de los beneficios: espacio propio, de calidad, de silencio y concentración mental, a los que puedes añadir los siguientes…
- tonifica, estimula y rejuvenece músculos, articulaciones, tendones y nervios
- alarga la musculatura y revitaliza el cuerpo
- dota de flexibilidad y agilidad
- estimula el riego sanguíneo
- tranquiliza la mente
- regula la respiración
- Practica diariamente
- Establece una hora concreta y cuántos Suryas vas a hacer
- Mantén los ojos abiertos (la práctica con ojos cerrados puede ser interesante pero si estás empezando no te la recomiendo, a no ser que lo hagas en clase con la dirección de un profesor/a)
- Tadasana es importante, no es sólo colocarte de pie para empezar. Construye tu postura con presencia e intención.
- Sé paciente
- Mantén el cuerpo activo pero sin tensión, no fuerces ni sufras en las posturas.
- Presta atención a tu respiración durante todo el ciclo
- Busca la calidad del contacto con el suelo con pies y manos
- Procura ser elegante e impregna de suavidad tus movimientos. Puede que al principio sean más bien bruscos pero la intención de ser ligero/a te ayudará mucho en tu progresión.
- La actitud lo es todo, mantén la presencia activa, sin distracciones.
- No te agobies con la perfección, busca la mejor expresión de ti mismo/a dentro de tus posibilidades.
- Cada momento de práctica es único y diferente. Escucha tu cuerpo y observa qué cambios o ajustes puedes darle para sentirte mejor.
- Obsérvate durante el Saludo al Sol, ¿Qué postura te cuesta más? ¿En cual te sientes más cómodo/a? ¿Dónde se acelera tu respiración? Las preguntas harán que tu práctica siga avanzando cada día.
- En los últimos ciclos mantén la postura de Adhomukha durante varias respiraciones.
- Al finalizar dedica algunos minutos al silencio: en relajación, en meditación o en ambos.
Fuente
Los tendré en cuenta porque he empezado hace poco y me va costando cada vez menos sí pero no veas!!! Muy bien explicado todo Mayte
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